viernes, noviembre 10, 2006

El cuento de misterio más hermoso del mundo


¿Cómo podría titularlo de otra manera?
Este relato no lo escribió Edgar Allan Poe, tampoco Agatha Christie, Ray Bradbury o Sir Arthur Conan Doyle.
El autor no es Saramago que me hace cimbrar con su manera de exponer las manías y miserias humanas, ni Gabriel García Máquez que siempre me sorprende con su realismo mágico.
El autor se llama Andrés, tiene 10 años y es mi hijo. Hoy decidió sentarse a escribir por primera vez un cuento, simplemente por el gusto de hacerlo y un poco porque lo motivó el hecho de que en los últimos días ha visto a su mamá muy entretenida y feliz con su blog.
Durante media tarde, lo vi debatirse con la computadora, y cuando me pidió que leyera su texto sentí una emoción indescriptible. Casi podía cerrar los ojos y verlo recibiendo el Premio Nobel de Literatura.
¿Qué quieren ustedes? Soy mamá, y la más orgullosa de sus retoños.
Por si fuera poco, el cuento habla sobre los fantasmas, un tema por el que mi negrito y yo sentimos una especial fascinación, de la cual después les hablaré con mayor amplitud.
Por ahora los dejo con el relato de misterio más bello del mundo:

En la Villa, solo.

Era un día nublado, decidí ir con mis dos mejores amigos al pueblo más cercano, llamado Villa del Muerto; fuimos a jugar, pero algo nos sorprendió, cuando llegamos no había nadie, lo cual era rarísimo, ya que al anterior día estaba muy poblado
-¿Cómo pasó esto?- dijo Marisa.
– No lo sé.
-¿Cómo lo dices tan tranquilo? Este pueblo estaba completamente lleno, no es normal que desapareciera así la gente- dijo Pedro y estaba en lo cierto
-¿Qué hacemos?
- No sé, solo tengo 20 pesos, no me alcanza para irnos en taxi, porque sólo pasan taxis aquí.
-¿Piensas en salir?- me dijo Pedro.
Marisa y yo lo vimos con una expresión de ¿estás loco?
-Lo siento- dijo
Después caminamos mucho tiempo y nos cansamos mucho.
-¡BASTA!, no puedo seguir-dijo Marisa entre sollozos y lágrimas.
- Tranquila, saldremos de aquí- le dije.
Se secó las lágrimas y siguió.
Después de un rato llegamos a un río muy ancho y largo.
-No lo podemos cruzar saltando como siempre- dije.
-Ese árbol hay que tirarlo, está chueco, será fácil- dijo Pedro.
Lo tiramos y cruzamos el río.
-Miren la salida. Corrimos a ella, pero a medio camino Pedro desapareció. Marisa y yo nos espantamos y después Marisa también desapareció. La salida igualmente se esfumó. Corrí sin parar asustado y vi a Pedro y a Marisa desmayados, les grité.
-¡Despiértense!, ¡por favor!
Pero no hacían caso los tomé de sus camisas y los arrastré, estaban muy pesados hasta que al fin salí de allí o eso creí.
Era de noche ellos no se despertaban voltee y vi que seguía ahí; vi una luz, eran papá y mamá en el coche
-Sube, Ramón.
Me subí con Pedro y Marisa inconscientes. Cuando salimos de ahí, Pedro y Marisa despertaron.
- No vuelvan a ese pueblo- dijo papá.
-¿Por qué?
- En ese pueblo asesinaron a la gente de ese lugar y esas personas desaparecieron y ahora sus almas se llevan a cualquier persona que se atraviese en su lugar y las dejan inconscientes hasta que salgan de ese pueblo y hasta ahora son las únicas personas que salen con vida de La Villa del Muerto.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

¿DIEZ años y el PRIMER cuento, con este resultado? ¡Mi Dios!¡Cómo no vas a estar así de feliz y orgullosa! ¡No dejes de estimular ese don, que es una fortuna!
Con afecto
Eber.

Apologista dijo...

Querida Taydé: con mi papá tenemos un lema que dice "lo que se hereda no se roba" y en este caso sigue teniendo vigencia.
Lo que yo decía en uno de los primeros comentarios se ve acá. Llenaron su hogar entre otras cosas con amor a la literatura y aquí están los frutos. Un cuento hermoso. Se perfila un gran escritor. Ya lo es.

Por otro lado, no pude evitar sonreir como tonta al leer los autores que citas al principio. Recuerdos del último verano descubriendo a Saramago con El evangelio según Jesucristo y el Ensayo sobre la ceguera. Obras increíbles realmente.
También recuerdo el tiempo en que viví en Macondo con los Buendía y cuando leía a Montag y su ingenua mujer Mildred, de Bradbury. Fué un salto al pasado en mi sala, y un profundo deseo de poder charlar con vos acerca de esas obras.
un millon de abrazos no nos suficientes, Marian.

Maris dijo...

Hola: permiso para pasar, llegue atrapada por la infancia.
Que lindo como hablas de tu hijo, y que lindo ver desarrollarse a los hijos.
A mi me pasa igual con el mio, si escribo o cuando intento pintar el tambien lo hace. Que responsabilidad tenemos las mamas, No? somos su ejemplo.
Cariños. Maris

Taito dijo...

Eber, Fíjate que sí, no quiero dejar de estimularle el don de las letras. Yo empecé a escribir muy niña, también, y aunque mis papás se dieron cuenta y lo estimularon lo mejor que pudieron, tuve que librar ciertas batallas para poder seguir trabajando con él. De hecho, por eso me gustó tanto tu blog, yo quiero empezar una novela, pero aún no me animo y me da gusto saber que tú tienes el valor y el talento. Creo que poco a poco y con ayuda de este blog iré soltándome. Un abrazo y gracias otra vez por la visita.

Taito dijo...

Querida, Marian: ¡Mil gracias por tus palabras! Yo también creo que tanto a él como su hermano los hemos ido conduciendo por el amor a las letras. De hecho, no sé si será a esto a lo que se dediquen, pero sé que construimos seres humanos con una visión más sensible del mundo.
En cuanto a los autores, a mí me sorprenden también tus comentarios, porque parece que los hubiera escrito yo. Yo, igual que tú, vibré con El Evangelio... y me sentí cimbrar con Ensayo sobre la Ceguera. García Márquez y sus 100 años de soledad fueron mi primera novela favorita por muchos años y Ray Bradbury me encanta. Caray, como quisiera invitarte ahora mismo un café, para poder platicar a fondo, pero no te preocupes que hallaremos la forma de acortar la distancia. Un abrazo fuerte, fuerte.

Taito dijo...

Maris: Bienvenida, no sabes cómo me gustó tu comentario porque no podía ser más cierto.
Ayer me decía mi esposo. ¿Ves como eres un solecito que nos inspira? Yo no sé si es así pero sé que tuve algo que ver en que mi hijito se soltara a escribir y eso me da gusto.
La responsalidad es grande, como dices, y no todas lo llevamos con la misma alegría. Sin embargo me da gusto encontrarme con otra mamá que inspira y sabe lo que ello implica. Gracias mil por visitar mi blog.

Apologista dijo...

Hermoso lo que decís. Se me ocurrió una manera. Pasate por mi blog y decime que te parece.
Abrazos, Marian.

Apologista dijo...

Tay pasate un minutito por Apología que se requiere tu hermosa presencia.
Hasta logooo, Marian.

Gaby del Río dijo...

Qué maravilloso cuento, jejeje, pero Dani también tiene los suyos, ¿no es así?.
Jajaja, en éste momento me acordé del cuento que le contó a tu mamá, antes de dormir, ¿recuerdas?
mil besos...
:)

Taito dijo...

Cierto, Gaby... ya sabes, fantasiosos como su mamá.
Un beso

Grimalkin el Bardo dijo...

Bien por mi sobrino. Y no me extraña nada...

Saluditos

;)

Taito dijo...

Hermano Grimalkin: Dice tu sobrino que gracias, le dio mucho gusto ver tu comentario, y te adelanta que seguirá escribiendo cuentos.
Luego te los enseña. Un beso

Anónimo dijo...

Bueno para la edad del muchacho, eso si no es el mejor cuento de misterio, digo No es el mejor, pero sin lugar a dudas por quien lo escribio y por la madre que lo puso aqui, es decir por la historia de como se escribio este cuento, es el cuento de misterio mas hermoso del mundo